Hablar de la filosofía Moral, no es tan atractivo al hombre “moderno”. Muchas veces, más bien prefiere escuchar sobre las propiedades curativas que tiene el limón.
Algo así como el limón es la Ética. Posee cualidades que modera los excesos del hombre para que se reconcilie consigo mismo y encuentre su propia verdad.
Los valores morales no deben exponerse en un frío saber literal, hay que inculcarlos en el neocórtex cerebral y en la sensibilidad. Para lo cual hay que emplear herramientas é insumos con cierto aliño, y hablar de ese linaje de estos sustantivos que unidos por el destino son portadores de tan ilustres conceptos llamados Ética y/o Moral. Términos que nacieron con igual valor conceptual, ahora con esferas distintas; pero que ambos significados se unen entre sí para hacer reflexionar al hombre en cuanto a su capacidad de conciencia.
La moralidad y la ética tiene carácter histórico, porque así como nuestra milenaria humanidad fué abriéndose paso por el mundo, también la conciencia moral fue evolucionando y abriéndose paso por sí sola en la mentalidad de los hombres; especialmente de sus precursores. Así ha venido ganando claridad por sí misma.
En cuanto los pueblos se van desarrollando socialmente, surgen las tradiciones, máximas, preceptos, edictos reales, imperiales. Se crea la norma de vida, y ese respeto a lo normado se le llama: “Eticidad de la costumbre”. Ideales que también fueron y siguen siendo fuente de la filosofía del Derecho.
Todo esto hoy se lleva a cabo en forma sistemática y científica. De modo tal que, los valores son pertenencia Universalmente aceptados por la humanidad.
¿Qué es entonces la moral? ¿Qué es la ética?
La moral, es el ideal del proceder individual o colectivo que se desarrolla con arreglo a condiciones subjetivas y objetivas de cada individuo o grupo. La ética exige conductas tanto en la conciencia como en la reflexión; está inserta en la libertad de la misma sociedad de un pueblo organizado.
Para los fines morales, la libertad es una condición; sin la cual la moral y la ética, no sería posible. ¿Qué obligación tendría sentido si no hubieran un sujetos que libremente eligieran cumplir el deber moral ?
¿Como han surgido estos conceptos - ética y/o moral?
¿Cual sería la genealogía de la moral? – hablemos de lo más próximo a nosotros en el tiempo y en el espacio –.
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En el siglo XIV, en un día de la Asunción, en la plaza de San Marco de Venecia, se expuso un muñeco de regular tamaño vestido en cuyo ropaje se daban las pautas de la indumentaria que debería usarse; que damas y patricios acudieron a mirar si concordaba con las Reales disposiciones que se pretendía como costumbre.
Felipe El Hermoso publicó edictos reglamentando la manera de vestirse y prohibiendo a los burgueses el uso del Armiño. Enrique II se mostró hostil a ciertas formas de vida y formas de vestir. Bajo su mandato apareció un gran número de reales disposiciones suprimiendo ciertas maneras de vestimenta exigiendo calidad de costumbre. Esto originó la moda de enviarse muñecas-cos vestidos a esas usanzas impuestas, (tal como hoy se envía ramos florales).
Hoy en día, por el uso de la indumentaria, los sociólogos deducen los grados de Cultura de aquellas sociedades.
Resulta admirable, que el hombre al construir su propia escala de valores haya incluido la costumbre de la estética indumentaria. Hoy desafortunadamente venida a menos.Santo Tomás de Aquino, afirmaba que “los valores estaban escritos en el corazón de los hombres y no en la razón”.
Santo Tomás, quizás, solo se refería a éticas materiales que no contienen Leyes sino máximas. La razón nos ha sido concedida como una facultad, es decir que debe tener influjo sobre nuestra voluntad de conciencia, ya que su ejercicio está dirigido justamente a producir en el sujeto una buena voluntad y no un tal o cual sentido que no precise ese principio abstracto y universal de una razón con contenido ético - moral. Santo Tomás, probablemente, no llegó a entender suficientemente que la esencia de la bondad moral, avanzaba fuertemente en la conciencia del hombre.
Se dice que la naturaleza de la moral, fluyó en la mentalidad de Sócrates, cuando sus juicios y su proceder moral, pasó más allá de las normas y de las tradiciones; adquiriendo con ello su propia autonomía como el verdadero paradigma de la moralidad.
Si buscaríamos otros sujetos paradigmáticos como aquél; solo encontraríamos preceptos o máximas de avataras tales como: “La regla de oro” de Jesús de Nazaret; el “óctuple sendero” de Siderarta Gautama (el Buda); o el mensaje de “krsna (su dios) a Arjuna en la batalla de Kuruksetra”; no contienen Ley práctica.
Botticelli, en su fresco “El nacimiento de Venus” realizado en el año 1495 pone de manifiesto el pudor: La “diosa Venus” que se encuentra totalmente desnuda parada en las valvas de una concha, transmutándose por sí sola al mundo tangible; por el fuerte viento advierte su desnudez, se ruboriza;– intenta cubrirse con sus cabellos– a su espíritu morigerado, le deviene a lamente “un manto” que corre a cubrir sus partes púdicas.
Y en su no menos famoso lienzo “La Primavera”, con dioses y ninfas de la mitología greco romana, nos da toda una sinfonía pictórica y moral. Ha personificado los valores morales con tres ninfas; o “las tres gracias”
1) voluptuosidad.
2) Castidad
3) belleza.
Además arriba del lienzo, el “dios cupido” flechando los corazones de las tres jovencitas allí entrelazados con sus manos. Todas o alguna de ellas podría ser motivada. (el flechazo de cupido) Y, el “dios Mercurio”. – Hermes en griego – este dios era conocedor de la transmutación de lo malo a lo bueno; les está indicando a las tres musas el eterno retorno de la primavera y el significado de la transmutación que se puede realizar en nuestro yo Atmatico.
Aquí, Botticelli nos da toda una clara exposición de como se conjugan los valores morales en el común hacer de la vida diaria.
Por lo expuesto, el hombre nace con su propio pudor y su propia vergüenza. De ahí qué: la moral, ha sido pensada y creada por la misma mentalidad del hombre; para el hombre.
En cuanto a la metamorfosis histórica conceptual del sustantivo – ética –, cuyo original significado es: autodominio. Hoy día como Ciencia, nos explica el proceso histórico de la moralización social.
Luego, si nos proponemos indagar el fundamento filosófico de la genealogía de la ética; tendríamos que recurrir a lo que tenemos más próximos como precursores; aquellos hombres y mujeres troyanos que con su Ciudad incendiada y destruida, revistiéndose de ese carácter agonal, se yerguen inmortalizando su epopeya.
De esa eticidad, escribe Homero; resaltando aquella guerra con contenido de valor moral que hasta los dioses del olimpo (héroes) intervienen en la contienda conformando un componente lúdico y ético a la vez.
Nos preguntamos, ¿Qué tiene que ver los (héroes) y la guerra con la ética?
Precisamente es en estos mitos y tradiciones, donde el sustantivo ética, se elevó a la más alta índole como especie de valor moral.
Tanto así, que el Arconte Pisístrato 613-527 y 549-538 a. C., enterado de los escritos de Homero, los mandó a concatenar dado su contenido de verdaderos juicios de valor Universalmente válidos.
La Ética, comporta dos atributos cualitativos que son: (agathòs) y (aretè)
Agathòs: Se le conceptúa con una índole de capacidad para desligar al sujeto de todo egoísmo moral; y que éste, pueda actuar en forma virtuosa. (Que sus máximas, tengan validez Universal).
Aretè: Es una fuerza que sale del alma. Tal era, la “dianoia”. Una fuerza pensante que viene del alma, hace que el sujeto articule sus juicios y acciones en forma virtuosa. – que raciocine antes de actuar –.
De tal manera que Agathòs y Areté, son dos atributos dianoiéticos subsumidos en un solo sustantivo llamado Ética.
En tal ra

La ética, nos va a decir como deben de ser las relaciones libres, con las otras relaciones libres.
Es decir, como deben tratarse los seres libres racionales, con los otros seres libres racionales.
Ubiquemos a la ética en el ámbito de las disciplinas más próximas a ella; que bien pueden ser la política y el Derecho. (entendiéndose que, todo esto, es producto intelectual del hombre para la vida del hombre).
De la política, podríamos decir que la encontramos dentro del campo de las Instituciones Estatales y Particulares.
El Derecho, siempre lo encontraremos en el ámbito de las normas que se dan así mismas aquellas instituciones. O casos relativos y/o hetero-relativos.
En consecuencia, aquellas normas deben de ser cumplidas, caso contrario serán injustas o no se respetan las políticas sobre el manejo de aquellas normas.
Si así fuera, el Derecho tomará el caso hacia su esfera, aplicará la política moralmente eficaz para llegar al ámbito de la justicia. (aclaro, que no me refiero a esa justicia del principio de utilidad que proponen los deontologos de la norma) ¿Como debería ser aquella política para que sea justa? ¿Como deben de ser aquellas acciones para que estén dentro del ámbito de la ética?
Filosóficamente, todas las acciones o transacciones entre seres racionales, para que sean éticas deben ajustarse al Ser. ¿Qué nos explica aquello del Ser?
Aristóteles, fue el primero en hablarnos a cerca del Ser. Fue al estudio de las causas primeras; a las que les llamó La Ucia. – el Ser –Los latinos lo tradujeron “sustancia”; luego la Ontología le llamaría “Entidad” o el Ser. Kant, le llamó “la verdad en sí”.
Porque justamente es en esta pura realidad, donde la ética se hace sentir en la conciencia del hombre encarándole sus actos morales.
¡Sé aquello que eres! se decían los griegos refiriéndose a ese estado dianoètico en que el alma genera un acto de emulación – el polemos – con el alma de los demás seres racionales. Ese reconocimiento de si mismo como libre para poder reconocer al otro como libre. Porque si yo no comprendo al otro como libre y racional; no me estoy reconociendo a mi mismo como un ser libre racional. (alter ego)
Tengo que sentirme dentro de ese común en cuanto común para darme cuenta que soy un “otro” entre los otros; y debo respetarlos como quiero yo que se me respete. Porque esa es la función de la ética, poner las proferencias de los enunciados al servicio de la ciencia de la lógica para que nos haga raciocinar cuando erramos Deontologicamnete.
Que si yo me compro una camisa de tal color – ¡ya no la puede comprar mi vecino! Qué yo, puedo desempeñar el puesto que desempeña mi jefe, sin que haya hecho los estudios que mi jefe ha realizado.
Un boticario, le expende cualquier medicamento a su potencial cliente, sin atenderlo semióticamente, quitando furtivamente el verdadero derecho a quien estudió años para conocer el tipo de enfermedades. Un secretario de juzgado, también comete actos no moral, al intentar asesorar a un litigante. Se debe tratar de vivir bien, no por la “suerte”; sino por las buenas acciones.
Un famoso pensador decía: la oscuridad no es simplemente lo opuesto a la luz; porque para entender que es la oscuridad, hay que tener conocimiento de lo que es la luz. – Sigue diciendo –, que un ciego de nacimiento no sabrá que es la oscuridad porque nunca ha visto la luz.
Lo mismo sucede con el ignorante – dice –, que no sabrá que es la ignorancia porque no sabe que es el conocimiento. – No comprende de cultura – Todo conocimiento se desenvuelve dentro de la objetividad de los valores. Por esta razón, la Ética: es educación, respeto, lenguaje, estética y calidad de vida.
Sería menester revisar las opiniones del mundo académico, y saber cuales son los aportes de la ciencia en cuanto a la moral y la ética. ¿Cómo es eso de, el ser; y el deber ser? – ¿Porqué debo ser moral? – ¿Los valores morales, se prenden en la conciencia, O, en la sensibilidad?
El ser; otra vez tenemos que mencionar a Aristóteles, porque es el autor del ser o ente. Con estos dos vocablos “ontos y logos” acuñados en el término ontología; en consecuencia, el ser es unívoco. (Lo estudia la ontología). El deber ser: este deber ser, es lo que debe suceder. Por tanto, este deber ser, no conlleva aspecto deontológico, más bien puede relacionarse con una imputación lógica.
Ahora, para que a mí se me dé el concepto del deber, antes, tengo que sentir en mi interior una “pulsión” volitiva que conlleva contenidos de valor moral haciéndome responsable del acto que voy a realizar a entera libertad. Y, mi máxima, tiene que tener contenidos de valor Universal. Y, debemos ser morales, porque caso contrario, no tendremos calidad de vida. No estamos alejando de nuestra propia humanidad.
El hombre nace y se desarrolla en una sociedad cultural de significados diversos. Allí en ese mundo, desarrolla su conciencia y construye su moral. Lo que, D. Loye opinó en el 2002 sobre el cerebro-moral; lo mismo lo dijo MacLean y el Dr. P. Ortiz C ha investigado mucho sobre la estructura neocortical del cerebro moral con sus tres componentes:
a) afectivo emotivo: Las motivaciones sensitivas y valores.
b) cognitivo productivo: Sus actitudes organizacionales cognoscitivas. Y,
c) conativo volitivo productivo: El carácter como componente de una personalidad éticamente organizada. El componente conativo es pulsión. Cuando en un acto relativo, o hetero-relativo se pone “alma corazón y vida” estamos dentro del efecto de esa pulsión conativa o ese carácter agonal de los troyanos.
Aunque deberíamos reconocer, que algo así intuyó Platón, o lo que decían los griegos – la dianoia – con respecto del alma: Platón mencionaba un alma con tres componentes:
1) paralimbico- afectivo;
2) parietotemporal- cognitivo; y
3) prefrontal-conativo.
En estos estados donde se dá el Imperativo categórico. Ej: Francisco Bolongnesi; Alfonso Ugarte y etc.
Por lo demostrado, La Ética, supera los componentes del limón. El limón, estará siempre con sus propiedades benéficas; pero que el uso excesivo puede causar peligro a la salud.
En cambio la Ética, siempre está como la excelencia de aquellos valores dogmáticos que pertenecen a la axiología del Derecho y la Política.
Además, tanto la Moral y la Ética, están representadas en los estamentos de la política y el Derecho; tan es así, que cuando una norma aún siendo positiva no encuentran respuesta en la Ley; la política y el Derecho, recurren a los usos y costumbre. Eso es la Moral. Eso es la Ética. En parte.

No obstante se deben expresar las siguientes precisiones historico-filosoficas;
1.-"La filosofia como ciencia" es una afirmacion de la corriente filosofica del positivismo y neopositismo, para la cual la Filosofia ya no reflexiona en esencia sobre las relaciones historicas entre el Ser y la Verdad para cada epoca historica dada sino que se convierte en una justificacion de la ciencia y del cientificismo poco importa las cegueras de la propia ciencia y sus racionalismos formalistas que excluyen todo aquello que se les diferencie como es el caso del metodo experimental de laboratorio que desconoce de entrada el contexto, el entorno y el contorno y la dimension no-formalista de lo Razonable que se diferencia del formalismo positivista y neopositivista de lo racional...Ahora bien si se quiere asumir el formalismo cientificista del positivismo y del neopositivismo se esta en el derecho de hacerlo, pero adjudicarlo perentoriamente a los demas tiene el riesgo de una postura dogmatica y de una exclusion de las posiciones no-formalistas de una filosofia no-cientificista de lo razonable que puede incluso reflexionar sobre las cegueras, las ignorancias y los vacios de la ciencia...;

2.-La unica causalidad que existe no es la causalidad lineal propugnada por Aristoteles y retomada por Tomas de Aquino, pues existen otras causalidades como la causalidad en "bucle" para la cual se rompe con las linealidades monotonas y se asumen las retroacciones como es el caso por via de ejemplo de la relacion Individuo-Sociedad- Especie-Individuo en que el Individuo desde el fondo de las edades al reproducirse genera la Sociedad con sus reglas, su lenguaje y su cultura y la Sociedad a su vez propicia la Especie al asumir los problemas comunes de la humanidad civilizada y esta a su vez genera retroactivamente el Individuo...;
3.-El llamado "librepensamiento" preconizado por un filosofo como Baruch de Spinoza debe tomar en cuenta la relacion transversal y compleja de la trinidad republicana libertad-igualdad fraternidad pues es indispensable repensar y reconsiderar las relaciones entre Libertad Igualdad Fraternidad para regenerar la democracia. La Libertad, la Igualdad y la Fraternidad constituyen una unidad compleja, transversal e inseparable entre ellas, aunque ellas mismas son a la vez complementarias y antagónicas. La sola Libertad acaba con la Igualdad y la misma Fraternidad. Pero imponer la Igualdad lleva a destruir la Libertad sin realizar la Fraternidad. Y a su vez la Fraternidad misma no puede institucionalizarse por decreto, pues ella debe regular la Libertad y reducir la Des-Igualdad. Y estos valores conciernen a su ligazón íntima con el interés general y con un espíritu profundo del civismo. Pues nó asumir el espíritu ciudadano lleva a abandonar el sentimiento de responsabilidad y solidaridad con el prójimo y entonces la Fraternidad desaparece. Estos tres valores simbólicos son muy importantes aunque son históricos, pues hay momentos en que el problema crucial es el de la Libertad , sobretodo en condiciones de opresión y bajo ocupación. Y hay otros momentos históricos en que el problema mayor es el de la solidaridad inherente a la Fraternidad , frente al hambre, las enfermedades, la miseria y el efecto de las catástrofes naturales, en que se combinan a veces la crueldad subjetiva humana con la crueldad objetiva de la naturaleza…Y en algunos momentos es imprescindible la Igualdad como alternativa a las exclusiones, negaciones, segregaciones, por motivos sexistas, de edad, proveniencia, color, cultura, creencias, apariencia física y situación mental, actividad cotidiana, lengua, inherentes a la condición humana, aun más si ella es planetaria…Regenerar la democracia sería entonces acceder a una democracia “cognitiva” en que la información general sobre lo esencial de la vida cotidiana deja de ser parcelizada y monopolizada por los expertocratas de turno. Y entonces se permite que las gentes participen real y verdaderamente en la escogencia de las opciones y en la toma de las decisiones que las afectan directa e indirectamente, asumiendo la unidad compleja, transversal e inseparable entre la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad que son a la vez complementarias y antagónicas.
Amigablemente, el Masón.